Amor decadente en el final de los 27 años salamanqueros
|Nota: ||Foto: Terraviva|
A pura energía finalizó pasadas las 6.30 am la vigésimo séptima fiesta salamanquera. Un carnaval de papeles picados, espuma, temperas y baile cerro el telón a predio repleto, con mas de 25 mil personas.
Las cinco noches tuvieron alrededor del 80% del campo cubierto del Club Sarmiento, siendo el viernes y lunes los destacados de la edición. Dicha situación favoreció a los mas de 50 puestos de comidas /bebidas ubicados alrededor del césped, que promediando el final de las jornadas muchos quedaban sin stock. Punto a favor para la situación económica.
Así también para la recaudación total, que si bien no está definido a cual entidad bandeña será otorgado, el fin solidario del festival ayudara este año con una importante suma. “Hace cuatro años venimos creciendo en todos los sentidos”, manifestó el intendente Pablo Mirolo quien forma parte de la Comisión Organizadora, dicha realidad se pudo ver reflejado sobretodo en el equipamiento y sector de escenario y camarines.
Artistas pudieron esperar su turno en camarines, o la misma prensa tener un lugar de trabajo. Faltaron detalles por ajustar, como el acceso de personas ajenas al área que hacía que la seguridad sea demasiada. Y es que aunque sea un encuentro de gran magnitud, el comportamiento aun es de ciudad pequeña, donde la amistad esta por delante de las restricciones.
Música de primer nivel.
Luciano Pereyra y Los Auténticos Decadentes fueron los responsables del gran cierre. Músicos, instrumentos, sonido, montaje y experiencia, marcaron la noche llena de aplausos. En primer lugar Luciano, que subió diez minutos después de lo pactado (00:40), cuando había un retraso de más de media hora. Hecho suscitado cada noche, pero resuelto siempre ante la responsabilidad estricta que presentaron los de artista nacionales.
“Hay que darle espacio a los que vienen tocando. Uds (por la prensa) deberían estar difundiendo a los chicos que andan dando vueltas ahora en el escenario, no prestarme tanta atención a mi”. Un categórico Luciano manifestó en conferencia, luego de paralizar al estadio por una hora y cuarto con baladas de amor, alguna que otra chacarera y la siempre complicidad de miles de mujeres (preferentemente) que hasta en un cartel le proponían matrimonio. Paisajes nuevos que gracias -o no- a artistas como él se ven en los festivales folclóricos.
Pasaron 16 grupos antes del lujanense, de los 31 números que despedían la noche. “No podemos decirles que no”, sostuvo el Jefe de Gabinete ante la inquietud de la extensa grilla que imposibilitaba desempeñar bien la actuación de muchos. “Evaluamos la posibilidad de una noche mas, así evitamos los traspiés. A nadie le gusta que le corten el trabajo”, deslizo la oportunidad para la siguiente edición.
Marcelo Toledo meta bombo y guitarra dejo al público despierto para que a las 3.20 am subieran los 12 decadentes armar la fiesta. “Hace 20 años venimos a Santiago, pero una fiesta con esta organización es impresionante”. Público de todas las edades parecían los coros de la banda, las canciones de principio a fin fueron cantadas. Y es que es imposible no encontrar alguna fiesta (casamiento, cumpleaños, etc.) donde no sonaron el emblemático grupo que lleva 31 años de vida.
Hasta la vuelta
La universidad de la guaracha, Kalama, fue el último bastión de baile continuo. Posterior a chacareras y carnavalitos de Roxana Carabajal. “Aquí comienza la diversión”, estallo en palmas en un predio que a las 6 am parecía recién –justamente- comenzar la fiesta. Pero todo tiene su final, el chamame de Carlos Zylinski, Ariel Camaño, Romina Chejolan y Los Kijanos fueron los últimos suspiros. Como cada día el sol despidió al restante publico, aquellos guerreros festivaleros que les parece poco las ocho horas de música y baile.
Paisajes que volverán a verse cuando el fuego vuelva a encenderse en el socavon del CLub Sarmiento, para los ya 28 años de festival. El mayor de Santiago del Estero, en la ciudad de La Banda, el de La Salamanca.
